Una fantasía sexual representa nuestros deseos más íntimos. En algunas ocasiones, estos deseos pueden confesarse libremente a nuestras parejas, mientras que otros prefieren mantenerlos en el territorio de la imaginación. En cualquier caso, las fantasías son una herramienta erótica que cumple la función de ayudarnos a explorar a fondo los límites de nuestra propia sexualidad.
Trasladar nuestras fantasías sexuales a la realidad, puede generar grandes satisfacciones pero la puesta en práctica en pareja suele ser un tema tabú. Esto puede ser una de las razones por las que existen sitios web como mileroticos Santiago de Chile, donde es posible encontrar anuncios de profesionales del sexo dispuestas a cumplir estas fantasías.
¿Cuáles son las fantasías sexuales más recurrentes en los hombres?
El libro ‘Tell me what you want: the science of sexual desire and how it can help you improve your sex life’, del psicólogo social y experto en sexualidad humana Justin Lehmiller, responde a esta duda analizando los resultados de un estudio realizado sobre una muestra de más de 4.000 participantes masculinos con edades comprendidas entre los 18 y 87 años de edad.
Los resultados del estudio revelan que las fantasías sexuales que más excitan a los hombres son:
Dominación y sumisión
El BDSM siempre ha sido un tabú, aunque se trata de una práctica que puede ayudar a incrementar la confianza en la pareja y estrechar la relación. La dominación es un juego de poder donde una persona ejerce la posición dominante mientras que la otra se ve obligada a asumir la posición pasiva o sumisa.
Tríos y orgías
Muchos hombres tienen el deseo de verse involucrados en relaciones sexuales múltiples, en un intento por dar cabida al lado animal e instintivo del sexo. En un mundo donde la mayoría de las relaciones se guían por la monogamia, los tríos y las orgías constituyen una válvula de escape, siempre que se establezcan y respeten algunos límites.
Sexo en público
Muchos hombres imaginan tener sexo en lugares públicos y poco convencionales, como ascensores, escaleras, probadores en almacenes, el baño de un avión o en la playa. Resulta especialmente atractiva la posibilidad de ser descubiertos en pleno acto, siendo además una fantasía versátil que puede cumplirse en infinidad de ocasiones.
Ver a su pareja teniendo relaciones sexuales con otra persona
Aunque suena paradójico, esta es una buena forma de estrechar relaciones con la pareja e incluso unirse más a ella. Mirar a tu pareja teniendo sexo con otro es una práctica conocida como el Cuckholding y requiere que ambos establezcan límites sobre lo que consideran cómodo y aceptable para que sea posible disfrutar la experiencia.
Juegos de rol
Los juegos de rol se basan en que uno o ambos miembros de la pareja asuman una identidad diferente a la real, incluyendo el uso de atuendos no habituales para recrear por completo el nuevo personaje. La interpretación de este papel puede reducirse a la cama o extenderse a otras áreas como una cita romántica y otras actividades, el límite se encuentra en nuestra imaginación.